El voucher es más que un comprobante de pago: respalda tus transacciones, te protege ante reclamos y complementa la emisión de boletas electrónicas. Descubre cómo usarlo correctamente.
El voucher es el comprobante que se genera al realizar una venta o un cobro con tarjeta de crédito o débito. Funciona como una constancia de pago para el cliente y también como un respaldo contable para tu negocio.
A diferencia de la boleta electrónica, que tiene validez tributaria ante el SII, el voucher no reemplaza la boleta, pero sí complementa el proceso de venta. Es decir, primero se genera el voucher a través del POS o del sistema de pago, y luego se emite la boleta electrónica correspondiente.
Gracias a sistemas como TUU, la emisión de voucher y boleta electrónica ocurre de forma simultánea e inmediata en la máquina POS, asegurando que tu negocio cumpla con el SII y que el cliente obtenga su comprobante al instante.
¿Por qué el voucher es importante?
Muchos emprendedores subestiman la relevancia del voucher, pero en realidad cumple tres funciones esenciales:
- Respaldo financiero: permite demostrar que una venta se realizó efectivamente y que el pago fue procesado por el banco o por el sistema POS.
- Control interno: si usas un sistema automatizado como TUU, el voucher se vincula automáticamente a la boleta electrónica, evitando duplicaciones o errores de registro.
- Seguridad ante reclamos: en caso de devoluciones o disputas con clientes, el voucher actúa como evidencia de la operación.
Relación entre voucher y boleta electrónica
Cada venta que realices con tu máquina POS de TUU genera un voucher y, simultáneamente, una boleta electrónica válida ante el SII.
Este proceso automático garantiza que no olvides emitir la boleta, lo cual es fundamental para cumplir con la normativa vigente.
Si quieres entender mejor este sistema, te recomendamos revisar esta nota.
¿Qué información contiene un voucher?
Un voucher puede ser físico (impreso por la máquina POS) o digital (enviado por correo o WhatsApp, según la configuración del sistema).
En ambos casos, debe incluir:
- Nombre del comercio o pyme.
- Fecha y hora de la transacción.
- Monto total de la venta.
- Tipo de tarjeta (crédito o débito).
- Número de autorización del banco.
- Últimos dígitos de la tarjeta del cliente (por seguridad).
Cuando el voucher se genera a través del sistema POS de TUU, además se asocia automáticamente a la boleta electrónica, lo que simplifica la contabilidad y permite un seguimiento detallado de cada venta.
¿Cómo mejorar la emisión de vouchers?
Si tu pyme realiza muchas transacciones diarias, automatizar el proceso es clave.
Con TUU POS, cada pago con tarjeta genera el voucher y la boleta electrónica al instante, sin necesidad de procesos manuales ni doble registro.
Además, puedes acceder al historial de vouchers desde el panel de control de TUU, lo que te permite:
- Revisar tus ventas por fecha o monto.
- Detectar posibles errores o duplicados.
- Cruzar información con tus reportes del SII.
Esto te ayuda a mantener una contabilidad transparente y a cumplir con la legislación tributaria chilena sin esfuerzo adicional.
Diferencia entre voucher, boleta y factura
Aunque los tres documentos están relacionados, cumplen funciones distintas:
- Voucher: respaldo del pago electrónico (no tiene valor tributario).
- Boleta electrónica: documento legal emitido ante el SII para ventas a consumidores finales.
- Factura electrónica: documento tributario para ventas entre empresas o servicios profesionales.
Emitir correctamente cada uno es fundamental para el orden financiero y la confianza con tus clientes.
En resumen
El voucher demuestra que una venta fue pagada y también fortalece la trazabilidad y transparencia de tu negocio.
Si tu pyme usa un sistema integrado como TUU, podrás emitir boletas electrónicas y vouchers en segundos, manteniendo tu operación alineada con el SII y brindando una experiencia de pago fluida a tus clientes.
Con TUU, todo queda registrado y sincronizado automáticamente -voucher, boleta y abono- en un solo sistema.
Haz crecer tu negocio con tecnología que simplifica, no complica.